jueves, 7 de marzo de 2013

6 de marzo de 2013, MONTE DEL PILAR DE MAJADAHONDA

Croniquilla de un paseillo remitida por Salva


Día oscuro como el alma de un tesorero de partido político. Amenaza lluvia, pero cuatro hombres poseídos por la llama de su fe montañera se aprestan a enfrentarse con el Monte del Pilar (Majadahonda). Ignacio salta de la cama y ya está en el lugar de encuentro. Gonzalo llega en coche y José Luis y Salva lo hacen en un tren de cercanías que han alquilado especialmente para esta ocasión.

Una última mirada al cielo y empiezan a caminar. Ignacio jura una y otra vez que siguen la ruta prevista pero sus tres compañeros tienen la impresión de marchar sin rumbo fijo a través de mares de barro de una calidad excepcionalmente buena constreñidos por alambradas claustrofóbicas y carreteras que conducen a lugares ignotos. Se cruzan con corredores, ciclistas y vehículos de reparto. Dado que van sin mochilas ni bastones tienen más aspecto de paseantes que de esforzados alpinistas. Pasan las horas y empieza a llover mansamente. A Dios gracias, en el horizonte, y gracias también al bendito mapa de Ignacio, entre nieblas y cortinas de agua se vislumbra el Centro Comercial de Monte del Pilar.

Como si de un Ángel Custodio se tratase, Braulio se aparece ante los montañeros confortándoles con su afecto y su sabiduría. Los cinco comen en un restaurante de inspiración gallega y descomunal tamaño. La relación calidad precio no era mala. Una vez apaciguada el hambre los cuatro montañeros y el seráfico Braulio retornan a sus hogares.

3 horas de marcha, 11 kilómetros y unos dos metros y medio de desnivel.

Ignacio apostilla, en el mail de envío de los trazados de la ruta y bajo el título "El paseíllo torero de hoy": "¡qué oportunidad perdida por Antonio y Joaquín para aumentar su ranking de excursiones de salón!. Será difícil que pillen otra oportunidad como la de hoy.


P.D. de Paco: Los espíritus curiosos podréis ver, pinchando en este enlace, una descripción de esta ruta, recomendada para infantes y alevines. El bucle vejez - infancia empieza a cerrarse ominosamente para los Mierconistas.

1 comentario:

  1. Pues para ser un paseillo tan infantil le has sacado mucho lustre. Solo apostillar que en el camino nos encontramos el GREFA, Centro de recuperación de fauna salvaje, pero afortunadamente no detectaron nuestro paso y pudimos continuar sin incidencias hasta el restaurante. Ignacio

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