lunes, 16 de octubre de 2023

11 de octubre de 2023, CORDEL DE LA REALADA

Hoy el paseo transcurre por los dominios de José Luis, el de la Acebeda, cuyo título otorgado por Salva ya no recuerdo si era el de marqués, que menos no se merecería. Se trata casi solamente de abrir el apetito para introducir un bordemanteles en el que estén presentes tanto los de andar como los de sosegar. 


Apertura de la jornada con el café en la gasolinera de Gonzalo, a las 10:30 de la mañana y traslado a La Acebeda, con un buen día de cielo despejado.

11:27 Los postes y la estela circular en madera con que se adorna un rincón de La Acebeda

Antonio, Aurelio, Gonzalo, Ignacio, Joaquín, José Luis, Marc y servidor echamos a andar tarde, a tempo lento bajo la batuta de Ignacio, con atención a que los detalles no desentonen.

11:32 Momento en el que Aurelio se interesa por la especie del árbol que se nos ha puesto delante.

Empleamos media hora más o menos en llegar hasta el arco - túnel por el que se pasa bajo el viaducto de El Plantío de la línea férrea Madrid - Burgos. Conforme pasa el tiempo nuestras aventuras van aumentando en intensidad y emoción. Hasta hace poco saltábamos alambradas y escalábamos paredes como cazadores furtivos. Ahora atravesamos túneles misteriosos y sombríos como quien no quiere la cosa. 

11:56 Ante y bajo el viaducto de El Plantío.

Y es verdad también que las puertas del campo no tienen secretos para estos correcaminos. Ni alambrada, ni somier, ni cancela de hierro, ni barrera basculante, ni zarzo tejido con sisal y palos, ofrecen mayor resistencia a la habilidad de nuestras manos. Sabemos como se abren y también como se cierran. No hay día miércoles en que no tengamos que abrir y cerrar las puertas del campo. Hoy no iba a ser la excepción.

12:01 Una de las puertas del campo, designada hoy como zarzo.
12:10 El prudente piscolabis sobre la vieja pared de piedras

Ignacio ha titulado este paseo como Cordel de la Realada pero observo que el  Cordel de la Realada tiene un trazado sinuoso que apenas coincide con la ruta que seguimos. Basta mirar el mapa. A mí el título de la ruta me gusta, que conste. 

Y mirando el mapa se puede ver también que esta parte del camino que seguimos después del tentempié transcurre por los prados de la Ermita del Saz. Pues bien, esa ermita no pasa de ser una hornacina con una imagen de la Virgen Blanca protegida por una puerta de cristal sobre un túmulo de rocas. Como si fuera un santuario, que lo debe ser también porque así lo llaman algunos, los vecinos del pueblo de La Acebeda celebran en el mes de julio una romería hasta allí. Y nosotros, casi una romería y para no ser menos, nos hacemos a su lado la foto del grupo.

13:17 En la ermita de la Virgen del Saz

Con alguna seta como trofeo, el apetito suficientemente despierto y los deseos de encontrarnos con el resto de amigos del grupo, hacemos el último tramo de nuestro breve paseo de hoy. Ha acabado haciendo calor y se agradece la cuesta abajo hasta el pueblo.

13:41 Entre El Cotanillo y El Molino, llegando a La Acebeda.
14:06 En la puerta de José Luis, ya con Braulio, Ignacio y Rodrigo.

El bordemanteles, en Buitrago, al aire libre. Ignacio ha traído las copias impresas de sus retratos de Aurelio, Braulio y Pedro, las penúltimas de este trabajo imponente. 


En las grandes ocasiones, y esta lo es, Aurelio saca su voz, que es mucha y bien afinada y, sin mayor compañía instrumental, nos regala una canción. Hoy, esa breve romanza preciosa "Mis ojos de ver los tuyos" de "Molinos de viento" que nos deja un regusto más dulce que los sabores del postre: como el de toda esta jornada llena de regalos.

17:05 No hacen falta el chaleco oscuro y el lazo. Gracias, Aurelio.

6,5 km. de distancia recorrida y 181 m. de desnivel.

lunes, 9 de octubre de 2023

4 de octubre de 2023, MIRADOR DE LOS POETAS

Un día para el recuerdo


Hemos quedado para andar, para conversar como cada miércoles, y también para recordar a un amigo. El Mirador de los Poetas, debajo de Siete Picos, destino hoy de nuestros pasos, es lugar de recuerdos: de Luis Rosales y de Vicente Aleixandre, desde luego, pero también de Antonio Sáez de Miera, de Francisco Acaso, de Pedro Laín... Este grupo de amigos quiere que, además, se recuerde aquí a José Luis, impulsor, ya hace un puñado de años, de nuestros paseos.




Cuando nos citamos a esa hora cercana a las 10 casi siempre se alberga la esperanza de contar con churros que completen el consabido café con leche. Hoy las esperanzas eran más fundadas porque el bar de Cercedilla donde Antonio nos había convocado suele ofrecerlos. Pero la suerte se torció y hoy precisamente la vitrina de los churros estaba vacía, qué se le va a hacer.

10:38 Aurelio, automóvil y móvil en la carretera de Las Dehesas, a punto de andar.

Y andar se hace fácil en esta mañana de buena temperatura, aún no olvidado del todo el verano. El piso del amplio camino que se dirige al puerto de la Fuenfría y sigue hacia Segovia es a medias apto para transeúntes y de ninguna manera para carromatos y cualquier otro vehículo de ruedas de tracción animal o mecánica. Es excesivo el romántico empeño de atribuir su construcción a los romanos o los excelentes ingenieros de caminos del siglo XVIII. Estas pistas de grandes piedras probablemente son de origen medieval, quizá aprovechando un trazado romano, eso sí, para facilitar el paso de animales de herradura y gracias. A este grupo le viene bien la claridad del trazado y puede que el ejercicio de tobillos, así que adelante y todo hacia arriba. 

Llegado aquí, es decir, nada más comenzar la narración de nuestro paseo, piensa el cronista que quizá venga bien hoy no excederse en las palabras y que sean las imágenes casi solas las que evoquen. De eso va hoy nuestro paseo.

10:56 Por el camino de herradura Madrid-Cercedilla-Segovia, calzada romana o borbónica que dicen.
10:58 Hacia el Puente del Descalzo, por la Pradera de los Corralitos y las bien conocidas y hoy concurridas pistas.
11:18 Una excursión de colegio, al fondo, compite en juventud y ganas de andar con nuestro grupo.
11:57 Día de recuerdos. Este, en piedra, del profesor Fernando González Bernáldez.
12:35 En el mirador de Vicente Aleixandre.
"Oh, sí, llevad amigos su cuerpo a la montaña, a los azules montes del ancho Guadarrama." Antonio Machado
De mirador a mirador. Del de Aleixandre al de Luis Rosales.




Después de la visita al Reloj de Cela, casi allí mismo, donde la pradera de Navarrulaque, llega el tiempo del almuerzo, hacia las 2 y pico de la tarde. Y sigue la lenta bajada. Y queda una tarde espléndida y un día detrás para recordar. 



sábado, 30 de septiembre de 2023

27 de septiembre de 2023, REFUGIO SANTUIL

Parece necesario, para situar el contexto, comenzar la crónica de este día con el pre-texto de Gonzalo en su convocatoria:


La primera excursión de miércoles fue al refugio Santuil hace 20 años, el 17 de Septiembre de 2003, y de ella queda como recuerdo mi cochambroso manuscrito.



En 2013 celebramos el décimo aniversario, para el cual Ignacio hizo un mapa especial.



Al tocarme preparar la próxima excursión y decidido, volverá Santuil en una versión leve, adaptado a nuestras condiciones, y para ello propongo el recorrido en rojo del mapa de Ignacio que os adjunto. Son 8 Km. Con un desnivel de 250 m. que se convertirán en 350 m. de subida.

Leve ha sido el paseo, pero, vistas las condiciones a que se refiere Gonzalo, no hubiese importado algún aurelio más. Más leve, me ha perecido, que el largo trayecto en coche desde la gasolinera, o gaso-electro-linera, hasta Braojos y, un tanto más aún, hasta el punto de partida. 

Lo de hoy ha sido un grato paseo sobre pista, por bosque, con día templado, con sus nubes y ratos de sol. Un andar lento, pausado, de conversaciones separadas. Para algunos, siempre tendría que ser así o parecido.

11:08 En el color sepia de las conmemoraciones, por la pista amable.
11:14 Ahora ya en el color contemporáneo.
11:26 Sobre el arroyo de la Cigüeñuela.
11:29 Joa y Antonio tienen hoy tema de conversación para rato.
12:10 En el refrigerio o piscolabis, por detrás y por delante,

Aprovechando la pausa, aquí va la relación de asistentes, los que se ven sentados con las almendras, el plátano y las bolitas de queso: Antonio, Aurelio, Gonzalo, Ignacio, Joaquín, José Luis, Marc y PacoMC.

12:42 A la vista del refugio, Gonzalo hace por situarnos completando los fríos detalles del gps.

Alargamos el paseo con intención de llegar hasta el cruce del arroyo de Butraguillo. No recuerdo muy bien por qué, pero se nos hace largo el suplemento: sería por lo de las condiciones de antes. El caso es que, sin llegar al Butraguillo, nos damos la vuelta por donde hemos venido y volvemos al refugio para reunirnos con Antonio y Joaquín, que se han quedado esperándonos, y dar cuenta del almuerzo. No sé si condiciones, pero los componentes de este grupo, ¡tienen un saque...!

14:20 La lepiota procera de campeonato queda para otro almuerzo.

Para rematar la jornada no hay más que echar a andar en un gran rodeo hacia el norte. Bosque, acebos y zarzas, conversaciones... y tanto falta de memoria como de fotografías, así que poco más ha quedado registrado en esta crónica menesterosa. Ni siquiera el habitual mapa del recorrido que Ignacio envía con puntualidad exquisita. Son las dichosas "condiciones" que Gonzalo mencionaba.


Sí que recuerdo el café y refrescos en Braojos, en terraza enfrente del bar y de la Casa de la Cultura, con que rematamos esta jornada. 

Y hoy sí que pegan los comentarios que ayuden a la memoria colectiva. Por favor.

lunes, 25 de septiembre de 2023

20 de septiembre de 2023, RUTA DE LAS MERINAS

El cronista titular, ausente de nuevo, solamente puede dar cuenta de la fecha, del título de la ruta comandada por Marc, de los datos que Ignacio ha recabado a través de otros y, aunque con dudas, de los asistentes, a saber:

  • Gonzalo
  • Jose Luis
  • Jose Mari
  • Ignacio
  • Marc
  • Antonio
  • Aurelio
  • Paco A

Seguramente la memoria de alguno de estos podrá añadir algún detalle más, cosa que se va a intentar.







lunes, 18 de septiembre de 2023

13 de septiembre de 2023, ALREDEDOR DEL EMBALSE DE PEDREZUELA - EL VELLÓN

Empieza esta singladura al 2024 con Paco A. al timón y José Luis H. a cargo del cuaderno de bitácora. Escasa hoy la dotación de la nave, pero firme y claro el derrotero y ligeros de equipaje como siempre.


De nuevo aquí estoy, inopinadamente, como cronista adjunto del grupo de mierconistas.

Convocados por Paco Álvarez, nos disponemos a dar comienzo al curso 2023-2024 con una ruta denominada Embalse de Pedrezuela o del Vellón, muy atractiva y adecuada tras la temporada de verano. Se presumía una asistencia numerosa, sin embargo, debido a algunas bajas anunciadas y otras de última hora, solo cuatro mierconistas nos concentramos en la habitual gasolinera de Cotos de Monterrey. A saber, Paco el convocante, Gonzalo, José María y este cronista.

La ruta ya la habíamos realizado con anterioridad (Febrero de 2022) y decidimos acortarla ligeramente para evitar un tramo de carretera, incómodo y con poco atractivo, de tal forma que dejamos un coche en el pueblo y nos trasladamos en el segundo coche hasta el punto de partida situado aproximadamente en el km. 14 de la carretera M-625 también conocida como carretera de Colmenar Viejo. Allí aparcamos e iniciamos la marcha a eso de las 10:30 de la mañana dispuestos a mantener bien alto el pabellón mierconista.

Arrancamos por una pista cómoda y bien cuidada y, salpicada de multitud de cancelas y puertas y rodeada por todo tipo de cercados, alambradas y muros. Se trata de una zona muy ganadera, incluso de reses bravas como se indica en alguna de las fincas que bordeamos. Debido a esto, no nos extraña importante tráfico de todo tipo de camionetas “Pick Up” durante la mañana.


Cuando llevamos un buen rato de camino, hacemos un alto para dejar constancia gráfica de nuestra presencia en la zona. 


Aunque el esfuerzo es más bien poco, al rato, hacemos nuestra habitual parada para reponer fuerzas mientras continuamos la animada charla. Estamos por la zona de Medianillos, con Dehesa a izquierda y derecha. Por las cercanías, desciende el Arroyo de Valdemoro hasta encontrarse con el Sardinera para desembocar en el embalse.

Continuamos camino y enseguida bajamos por la ladera de La Rebollera para encontrar las primeras aguas del Embalse en una de las lenguas que se forman en su perímetro. A partir de aquí la pista circula muy cerca del borde del agua desde donde se divisan algunas vistas bonitas e, incluso, algún pequeño velero medio parado por la ausencia de viento.


Es un tramo muy largo hasta muy cerca de Guadalix, cuando se convierte en un paseo bien cuidado y señalizado llamado Paseo de la Ermita.

A eso de la 1:30 de la tarde, llegamos a la altura de la Cueva Peña Rubia. En este punto desemboca el Arroyo Valdesaelices y es el final de una importante lengua de agua del embalse, ahora más bien un fangal debido al bajo nivel de las aguas.


Como digo, estamos a la altura de la Cueva, que algunos visitamos en la anterior marcha, pero que ahora decidimos por unanimidad prescindir de tal aventura. Así pues, continuamos camino hacia la próxima punta con bonitas vistas del embalse donde paramos a comer a eso de la 14h.

Reiniciamos la marcha y a eso de las 15h. estamos a la altura de la Ermita de la Virgen del Espinar, de construcción relativamente moderna ya que la original estaba situada en lo que hoy es el centro del Embalse.



Seguimos caminando muy cerca de las aguas del Embalse. A nuestra izquierda, las laderas de los montes cercanos y lo que parecen vestigios de antiguas canteras. A nuestra derecha, restos de El Pilancón, que vaya a saber usted lo que fue.


Vamos terminando. El tramo final es un paseo casi urbano pero muy agradable, antes de llegar a las calles de las inmediaciones de Guadalix de la Sierra donde aparcamos el primer coche.

Tras recoger el segundo coche procedemos a tomarnos un café en el pueblo con amena tertulia, y despedimos la jornada.

Hemos caminado tres horas y tres cuartos, con un recorrido de 11,7 km y 124 m de desnivel acumulado.

Hasta la próxima.

domingo, 2 de julio de 2023

21 de junio de 2023, LOS ALMORCHONES

Había estado manipulando la cámara de fotos para no se qué y se quedó con el sistema de enfoque equivocado. Desenfoque de fotos por lo tanto, unas sí y otras no, remediado de aquella manera como se puede ver. Espero que el desenfoque no se haya extendido a la breve descripción de nuestra jornada. Último día del curso, con calor y ausencias, después de la nutrida participación en la comida del pasado miércoles. Con este paseo cerca de los Almorchones Ignacio recuperó la ocasión frustrada por la lluvia de hace unas pocas semanas y el cronista recupera el buen hábito de escribir en el cuaderno.


Ignacio ha titulado: "la ruta de las aguas". Aguas desde el inicio del paseo, como las del arroyo Zahurdón donde dejamos los coches. Hay más nubes que claros y hace calor. Hoy somos ocho los que nos reunimos para andar: Antonio, Aurelio, Gonzalo, Ignacio, José Luis, José María, Paco A. y el que suscribe. Por allí, un numeroso grupo de chavales se prepara para dar un paseo, su paseo, que quizá coincida en algún punto con el de estos veteranos.

10:25 Aurelio desenfocado aunque sonriente.

No hay prisas. Entre el calor y la suave cuesta arriba se quitan las ganas de correr. Hay tiempo para averiguar el nombre de los botones amarillos sin pétalos que salpican el terreno. Es la santolina, de propiedades antiinflamatorias y ornamentales. Quedarían bien en una fotografía, pero se me salen de foco y así lo dejo, en plan ornamental.


Las puertas en el campo están para saltarlas. No me crean ustedes. Las puertas en el campo están para lo que están y solamente las ganas de bromear resultan en esa imagen de falsos equilibrios. A la derecha según se mira de esa puerta de vehículos hay otra pequeña y accesible para peatones y andarines, como debe ser.

11:21 Dicho queda que es puro circo

Una hora nos llevó llegar hasta el embalse de la Maliciosa, todo por buen camino. Los Almorchones, que resultan ser dos promontorios a nuestra derecha, van quedando detrás y debajo. Hemos pasado por tres collados casi sin sentir: el de la Plaza, el de los Escondidos y el de Majaespino. 

11:36 El embalse de la Maliciosa es pequeño y oscuro. Una alambrada lo protege relativamente de asaltos mejor o peor intencionados. Precedidos por Ignacio, Antonio y el cronista se acercan a la orilla. Unos pececillos de nerviosos movimientos se dejan ver ahora sí, ahora no.


El calor ha aumentado y el agua es una tentación. Mientras el grupo de críos que ha vuelto a aparecer hace una pausa fuera de la alambrada y el grupo de mayores se va al otro lado del embalse, Antonio se desviste y se zambulle en su estanque dorado. Dice que el agua está deliciosa y siente que los pececillos nerviosos le hacen cosquillas en los pies.


El baño ha durado poco, lo imprescindible. Seco y vestido, nuevo, Antonio se une al indiscreto fotógrafo y, juntos, retoman el camino con los demás, que ya han celebrado el piscolabis. Envidiosos, los compañeros de jornada, que no de chapuzón, le señalan como infractor y le exhiben tan contentos al pie del cartel. Mientras tanto, Paco A. nos ha abandonado para atender obligaciones y se vuelve por donde hemos venido.

12:17 De verdad que nadie se había fijado antes en el edicto.

El camino se pone antipático en la más bien larga bajada que hay que hacer desde el collado que separa la peña de las Poyatas y la peña Retuerta: un terreno de gravilla menuda, muy seca, muy deslizante, peor incluso cuando el camino se hace pista de cemento abandonada a su suerte.

12:33 José Luis evita, saliéndose del camino, el resbalón.

A lo largo de la traicionera bajada hay piedras dignas de mirar por su color, por sus formas y, desde luego, por su estructura. En la de la de la esquina de abajo, a la derecha, se puede apreciar su configuración original, que subsiste a pesar de la fragmentación y de la erosión. En algunos años -¿cientos?- cuando se hayan separado del todo los pedazos será un rompecabezas de difícil reconstrucción, salvo para los que hayan conservado esta fotografía.


La Fuente de la Colmena tiene varios caños y varias piletas; está muy bien conservada, pintada en blanco recientemente y con muros, bancos y suelo en piedra tallada. Como el sitio invita a sentarse, lo hacemos brevemente y algunos probamos el agua del caño principal. 

13:00 La Fuente de la Colmena

Seguimos hacia el Alto del Hilo, posible extensión de nuestro paseo, pero ya nos vamos haciendo a la idea de dejarlo para mejor ocasión por aquello del calor. Durante el trayecto desde la fuente de la Colmena hasta la carretera también hay cosas que mirar: un predio diminuto cercado con alambre, con una cabaña de maderas y latón, una escalera y un botijo - mirar pero no admirar -; un hito del Camino de Santiago con chapa vitrificada; unas mariposas melanargias apareándose; y un pequeño escarabajo, que se conoce como zapatero no sé por qué, sobre la santolina. 


Un poco antes del cruce de la M-601, Antonio y Gonzalo deciden atajar y regresar al punto de partida por lo tieso, por lo que parece un buen camino. Y los demás, aunque dejando de lado el Alto del Hilo, obedecemos el trazado del plan original y seguimos hacia el embalse de Navacerrada por donde la Casa de la Salve. Siguen apareciendo cosas que ver, como campos de diminutas flores moradas de tomillo rastrero y el bruñido espejo de la superficie del embalse. El dichoso foco de la cámara dio para flores pero no para espejos.

14:00 Podíamos haber hecho por aquí el almuerzo, que asientos no faltaban, pero elegimos la vecindad del embalse.

Aurelio ha traído el muriel pero no lo descorchamos. La tarde está más bien para refrescos y tentempiés, bochornosa y un tanto gris. Por ahí nos quedamos almorzando, donde el mapa lo señala aunque con esas indicadas ¨vistas¨ un tanto ocultas por la vegetación. El bajo nivel del embalse nos ahorra un buen trecho de andar rodeando el agua. 

14:01 Navacerrada al fondo

Un último empujón, compuestos ya debidamente pero sin muriel, por un paseo que se titula La Longuera y donde se reúnen, todas a la vez, las delicias de la vida campestre. Así se infiere de la lectura del texto, un tanto afectado, de la placa verde que adorna el comienzo del paseo desde Navacerrada. 

14:47 En madera y en metal, para que se sepa titular el paseo.

Al cabo de poco ya estamos donde se quedaron los coches. Antonio y Gonzalo han buscado asiento a la orilla del Zahurdón para dar cuenta de su almuerzo y esperarnos. Nos cuentan que el recorrido que hicieron desde el cruce de la carretera fue muy cómodo y breve, lo que anotamos como referencia para el futuro.

15:00 Nos reunimos y Antonio recoge los enseres del almuerzo.

Y colorín colorado, este curso se ha acabado. Dice Ignacio, que lleva la cuenta de los números, que hemos salido 33 miércoles, con 380 km. recorridos y 8.757 m. de desnivel superados, casi un Everest. Nada mal, digo yo. Y tenemos la esperanza de seguir en la brecha el curso siguiente y los sucesivos.

Han sido hoy 9,8 km. y 332 m. de desnivel.