lunes, 19 de septiembre de 2022

14 de septiembre de 2022, LA CALZADA ROMANA DE EL ESCORIAL

Ignacio dice ¨la ruta de la vuelta al cole¨ y a este cronista le parece bien el título, por qué no, si estamos siempre aprendiendo y nunca aprendemos. Habíamos estado por aquí hace un par de años y nos quedó buen sabor de boca, así que, a sugerencia también de Ignacio, decidimos repetirla para inaugurar el curso 2022 - 2023. Había amenaza de lluvia -al 50%- pero hicimos bien en correr el riesgo porque no llovió y quedamos contentos: de vernos nuevamente, de haber salido indemnes del intento y de tener motivos para decir a los que se ausentaron que les echamos de menos y que esperamos verles pronto.


10:17 De izquierda a derecha, José Luis, Gonzalo, Marc. Antonio, Ignacio, Rafa, José María y el que sujetaba la cámara, que no se ve.

Ese sitio de la fotografía de los coches es la calle de Bailén, en El Escorial, donde se dejaron parte de ellos; otros dos se subieron a la Silla de Felipe II para acortar el paseo, en atención a las circunstancias de estreno de curso y a las posibles mermas de forma. A estas horas de la mañana, cielo nublado y ambiente ligeramente húmedo, sin calor. 

11:06 Nos ha gustado el nombre de la finca y ahí nos hacemos la segunda foto de grupo.

Al rato de echar a andar, vemos que la finca por cuya entrada pasamos tiene un nombre llamativo, de una cosa rica que algunos de nosotros ya se verían en dificultades para masticar (¨residuo de las pellas del cerdo, una vez derretida la manteca¨, dice la RAE). En honor a la vianda y a la finca posamos para el fotógrafo. Hasta aquí han sido tres cuartos de hora de paseo muy sin sentir, con un buen trecho en paralelo a las vías del tren y una preciosa vista furtiva del monasterio iluminado por un rayo de sol entre nubes muy oscuras.

11:16 En la calzada romana

Desde la entrada a El Chicharrón, y caminando por un buen camino que aparece en los mapas precisamente como colada del Camino del Chicharrón, (el del IGN también rotula, por chinchar a las normas de calidad, "Chincharrón") se llega pronto a los restos de la calzada romana o de sus muy sólidos cimientos. El cronista ha investigado un poco la historia de esta calzada y encuentra mucho dato preciso pero sospechosamente contradictorio, así que opta por dejar que cada cual de los lectores se haga su composición de lugar.

11:30 Seguimos por la colada del Camino del Chicharrón

11:57 Hoy no han faltado buenos asientos para el piscolabis

Cuando el piscolabis, cuatro gotas, o quizá tres, diminutas, como la única concesión en toda la mañana a la ominosa y errada predicción de días atrás. Alguno de nosotros saca de la mochila el impermeable, pero solamente para estrenarlo.

12:10 Un tramo de la calzada más relleno y más transitable

Hacia el final de la colada volvemos a pisar otros evidentes restos de calzada romana. En este trayecto no hay pérdida posible, y así está bien porque hay que dejar descansar a Ignacio un rato para que mire el paisaje en vez del gps.

Llegando a la Casa Vedado del Monte, según nombra el mapa, donde daremos la vuelta hacia El Escorial, un par de paseantes, veteranos como nosotros más o menos, nos preguntan si por allí llegarán a Zarzalejo. Esas veces en que se nos ve como expertos conocedores del terreno que pisamos gratifican mucho pero también envanecen, por eso el cronista adopta de vez en cuando el perfil de peregrino inocente y pregunta si por aquí iremos bien hacia Santiago de Compostela. Al cronista mal se le debe dar el teatro porque nunca le han tomado su pregunta en serio.

12:59 El severo jardín de una finca, con su fuente seca y la casa en la umbría
13:00 Y ya volviendo por Los Ermitaños

El trayecto de vuelta se hace por un amable camino que se llama de los Ermitaños, de tierra muy pisada aunque no sé si desde tiempos de Roma, en sombra más que al sol, con mucha hoja seca y recias paredes de piedra a uno u otro lado. Como tres cuartos de hora en total hasta la silla de don Felipe, casi nada. Allí, al cronista le da por fijarse en los colores que ha dejado en la maleza este verano de calor inclemente, como de otoño pero más ocres, más pardos...


Y después de bajar en coche a recoger el resto de ellos en la calle de Bailén, nos vamos a la Horizontal al bordemanteles. Alguno de los navegadores se hace un lío y hay que recorrer más calles de las necesarias.


14:30 más o menos. Conversaciones simétricas.

Para los interesados en la parte gastronómica se debe decir que la comida estuvo bien -lugar, calidad, cantidad, servicio - y que prolongamos ligeramente la sobremesa para acabar de hacer la reseña del verano y disfrutar de la luz uniforme y fresca de un cielo cubierto.

Han sido 8 km. y pico y. menos de 200 m. de desnivel, suficientes.

5 comentarios:

  1. Es una gozada esto de retomar el curso con una bonita ruta, en buena compañía, un agradable día, y rematar bordemanteles en "horizontal" como debe ser. Para completar esta estupenda crónica. Muy bien Paco!!"

    ResponderEliminar
  2. Buena ruta, buena compañía y buen manjar. Que mas se puede pedir. Además después de escuchar el reportaje de Juan Ignacio en radio he descubierto quien nos guía de verdad…

    ResponderEliminar
  3. Muy bonitos texto y fotos. Y muy merecedor el propósito de no dilatar las crónicas, que tus admiradores esperamos, para saborear el regusto que nos dejan las excursiones.
    Como ya sabes, cuenta con mi colaboración para lo que necesites.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. He escrito mi comentario, pero no sé si se ha publicado. Yo le dí a PUBLICAR pero luego, cuando lo intenté leer para ver si estaba, no aparecia. Aaaaah !!!!

      Eliminar
  4. Excelente reportaje fotográfico con la prosa suficiente y justa. Buen comienzo de un curso que promete.

    ResponderEliminar